Notas: Esto lo hice por una chaqueteada, me salió la versión femboy de la rubia de resident evil haciendo está monda de glory hole(gracias a kaso que por ella se como se llama) y se me ocurrió esto, esperó lo disfruten tanto como yo y dejen un comentario.

(One-Shot de Alejo TwcLover)

«Mételo 😉 aquí»

—Hey, ¿por qué tan serio? —cuestionó el de rastas mientras observaba al pelinegro totalmente inmóvil en su pupitre.

Bill se quedó estático en su asiento con la cabeza agachada, creyendo que quizá si no hacía nada Tom dejaría de molestarlo.

Resulta que Tom, en una de sus múltiples bromas hacía el de pelo negro, llenó toda su silla de pegamento y, cuando estuvo completamente pegado, le tiró una bolsa de basura en todo su cuerpo, provocando la risa en todo el salón.

Tom era el bully que había en todo colegio, sin embargo, sólo se burlaba de alguien en específico y ese era nada más, y nada menos, que Bill, el «maricón anoréxico» del salón.

Bill no negaba ser gay, todos sabían que lo era, pero al parecer a Tom le chocaba en demasía que fuera homosexual y, por ello, cuando lo supo es que comenzó a hacerle bullying mucho peor que antes.

—¿Cuántas veces tendré que hacer esto para que te des cuenta de qué no perteneces aquí? No queremos un maricón en esta escuela, ni aquí ni en ningún lugar —terminó por decir lo último Tom en el oído de Bill.

Bill aprovechó esto, para girar la cabeza y besar al de rastas, harto ya de los comentarios homofóbicos de éste.

Tomándolo por la nuca es que Bill obligó a Tom a quedarse en el beso hasta que Tom ejerció la fuerza suficiente para soltarse.

—Ahora tú eres un maricón también. Chúpame bien la verga y después vete bien a la mierda con tus estúpidos comentarios homofóbicos —respondió Bill, recibiendo un puñetazo en respuesta.

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Ambos, debido a la pelea, es que terminaron siendo sancionados por tres días, Bill hecho una furia ya que todo fue gracias al estúpido de Tom.

Georg era uno de los mejores amigos de Bill, y al enterarse de todo, viéndolo tan molesto por haber perdido tantos días de clase, es que se le ocurrió una idea, invitarlo a una discoteca y beber hasta que el enojó se le esfumara, ¿cómo no se le pudo ocurrir antes?

Bill se negó al principio, ya que no estaba de humor, pero Georg logró convencerlo y es que al día siguiente Bill ya estaba arreglándose para ir camino a la discoteca.

Mientras se arreglaba es que maldijo a Tom con todas sus fuerzas, ya que no sólo ahora tenía que maquillarse de más por el gran moretón en su ojo, si no que también tuvo que bañarse más de lo normal por el olor a mierda que tenía y como sí eso no fuera suficiente, también dañó su pantalón favorito.

—Tom Kaulitz eres un hijo de puta… —habló Bill en total soledad mientras delineaba sus ojos con lápiz negro, en verdad odiaba al de rastas.

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Cuando estuvo ya en el lugar junto a Georg, es que le dio la razón a su amigo, quizá con un par de tragos podría olvidar el coraje e ira que tenía dentro, y así fue.

Bill tomó hasta olvidarse de su propio nombre, ni siquiera se acordaba por qué en un principio estaba molesto, lastimosamente su cuerpo no logró soportar tanto alcohol y terminó vomitando.

Para su buena suerte, al menos en esto, sí logró llegar al baño y no como otros que vomitan ahí mismo, convirtiéndose en la humillación del momento.

Cuando Bill terminó, se limpió los restos de su boca con la mano, sentándose en la tapa del retrete, queriendo recomponerse antes de volver con Georg.

—»Mételo aquí»… —vocalizó Bill lo que decía al lado suyo en la pared y abajo de la frase había un hueco, sonriendo de lado por las ocurrencias de algunos.

Bill es que no pensó bien sus acciones y casi en automático es que se levantó del retrete y, a continuación, se bajó el cierre del pantalón y la ropa interior, teniendo una erección bajo ella sólo de pensar en meter su pene ahí y recibir una buena y deliciosa mamada.

Tomó su miembro y lo guió en dirección al hoyo de la pared, cualquier otra persona que hubiera visto eso evidentemente no le habría prestado atención, excepto Bill, que estaba borracho a más no poder y no pensó en las mil y un razones de por qué estaba mal meter su pene ahí.

Para su buena suerte, otra vez esa noche, no tuvo que esperar mucho tiempo hasta que sintió los labios de un completo desconocido alrededor de su verga, comenzando a chuparlo ansiosamente de adelante hacía atrás.

Bill empezó a jadear de puro gusto, deseando poder conocer a la persona detrás de esa pared y darle gracias por tan buen trabajo que estaba haciendo con su miembro, succionando con tantas ganas que lo hacía ver estrellas.

Bill empezó a mover las caderas de adelante hacia atrás, aferrándose a la pared con fuerza mientras embestía la boca del desconocido, buscando pronto su propia culminación.

Después de un tiempo es que el desconocido dejó de chupar el miembro de Bill, sacándolo de su boca y dejando al pelinegro confundido y, al mismo tiempo, frustrado por no haber conseguido correrse a tiempo.

A pesar de que Bill ya no sentía nada y estaba lo suficientemente molesto como para mandar todo a la mierda no se apartó, algo le decía que no debía de hacerlo y por ello es que se quedó quieto en el mismo sitio.

Mientras Bill seguía inmóvil en su sitio, es que la persona al otro lado de la pared acallaba sus propios gemidos con su mano, mientras que con la otra se preparaba a sí mismo, metiendo dos dedos en su interior de golpe, ansioso por sentir todo el grosor de Bill dentro suyo, y fastidiado, ya que, al no haber traído su coleta para el cabello, las rastas no lo dejaban concentrarse removiéndose a su alrededor conforme se preparaba.

Sí, era Tom quien estaba detrás de esto, su bully, y también la persona que tenía un gusto secreto por Bill, uno que desde hace mucho había negado sentir y por ello es que le hacía bullying al pelinegro, algo raro ya que a pesar de todo nunca dejó de gustarle.

Resulta que Georg, amigo de Bill, y secretamente también amigo de Tom, logró ser convencido por Tom para que llevará a Bill a un lugar decente y así Tom poder declararle sus sentimientos para por fin quitar todo ese peso de encima que no había podido liberar hace mucho tiempo.

Cuando se dio cuenta de que Georg había llevado a Bill a una discoteca, es que no pudo creer lo idiota que era su amigo, aún así siguiéndolos de lejos y echándose para atrás cuando estuvo dentro de la discoteca con ambos también en ella.

No podía declarársele a Bill en un lugar cómo ese, incluso había traído lubricante por sí es que Bill le perdonaba lo mierda que había sido por tanto tiempo así como por arte de magia, todo se había arruinado gracias al estúpido de Georg.

Tom después es que se metió al baño, encerrándose en uno de los cubículos de este, para tratar de despejar su mente de todo lo que le estaba pasando y que incluso por estar emocionado de hablar con Bill es que se le olvidó su gorra y la liga de sus rastas.

Cuando por las palabras de Bill, es que Tom se percató de que había entrado al baño, y no sólo eso, también estaba al lado suyo, una pared en medio era lo que los separaba y Tom inmediatamente se sintió nervioso, no sabiendo qué hacer en un momento como ese.

Cualquier otra persona simplemente lo dejaría pasar pero Tom no, tenía a su crush al lado suyo, quizá no era la mejor forma de empezar las cosas pero no quería perder la oportunidad, sin embargo, tampoco era capaz de verlo cara a cara.

En ese momento es cuando Tom notó que algo se asomaba por el orificio a su lado, alzando la ceja, incrédulo por lo estúpido que era Bill ebrio.

A pesar de que la situación le causará algo de gracia no pudo evitar sentirse excitado por el gran tamaño de Bill, mismo con el que soñaba varias veces, despertando totalmente sudado y con la ropa interior pegajosa.

Incluso si esto no era lo que Tom había planeado no se mortificó al respecto, y se arrodilló frente al miembro necesitado de Bill, dejando un beso en la punta y metiendo sólo la mitad dentro, deleitándose a sí mismo con el sabor y al final no pudiéndose contener, metiéndoselo por completo a la boca y chupándolo con ansia.

Tom no había tenido sexo con nadie, mucho menos había hecho sexo oral, y por ello es que de vez en cuando se le iba el diente o algo parecido, Bill al parecer no lo notaba, gimiendo gustoso por la atención que le otorgaba el de rastas incluso si no era la mejor o más profesional.

Después es que Tom sacó la verga de Bill de su boca, aún no se corría y es que Tom tampoco quería que lo hiciera, por lo menos no en su boca.

Y volvemos al presente, con Tom por fin terminando de prepararse a sí mismo ya que en eso sí tenía algo de conocimiento, muchas veces tuvo que dedearse mientras pensaba en Bill para contenerse de ir al colegio y besarlo ahí mismo, no podía romper su papel de bully en ese momento.

Tom sacó sus dedos de su interior y echó una buena cantidad de lubricante en el pene de Bill, masturbándolo un poco mientras lo guiaba en dirección a su entrada, mordiéndose el labio para evitar gemir cuando logró meterlo por completo.

Le hubiera gustado poder decirle a Bill que era su primera vez y que fuera suave pero esta vez no tuvo la oportunidad de hacerlo, y Bill empezó a moverse con velocidad, sacando un gemido fuerte por parte del de rastas.

Sus dedos no eran nada en comparación a Bill, era mucho más grande de lo que hubiera podido imaginar y, a pesar de que Bill no tuvo compasión con él, y lo estaba embistiendo cómo si no hubiera un mañana, Tom no se quejaba, imitando los movimientos de Bill, pese al dolor, que poco a poco se fue desvaneciendo conforme pasaba el tiempo.

Bill era algo torpe con las estocadas, ya que estaba borracho, pero a Tom no le molestaba, al contrario, estaba sintiéndose totalmente excitado por la brusquedad de Bill, tapando su boca para contener los gemidos cada que arremetía contra su próstata.

Tom en ningún momento se le ocurrió tocarse a sí mismo, creyendo que con Bill ya era más que suficiente y así fue, corriéndose en un par de minutos, apretando su interior y provocando que Bill también se viniera, Tom soltando un gemido que no pudo contener debido al placer que le provocaba el sentirse tan lleno.

Cuando Tom se separó es que notó cómo es que de su interior chorreaba el semen de Bill, no esperaba nada de eso, pero de todas formas estaba satisfecho, había perdido la virginidad con su crush y aunque ahora no creía estar del todo listo para declarársele, pues ya había avanzado en algo al menos.

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Cuando pasaron los tres días es que Bill volvió al colegio, algo animado, ya que a pesar de no recordar mucho de lo que pasó en la discoteca, sabía que había tenido relaciones con alguien, no tenía ni idea de quién era pero recordaba lo bien que lo había hecho sentir con su boca y otras partes de su cuerpo.

Creía que nada ni nadie podría arruinar su día hasta que llegó él, Tom Kaulitz, quedando boquiabierto cuando el de rastas pasó de largo.

—¿Qué?…—Bill se sentía confundido, normalmente Tom lo molestaba todos los días sin falta, ¿por qué hoy no le hizo nada?

—Quizá ese beso despertó algo en él, aprovéchalo lo más que puedas —agregó Gustav, otro amigo suyo que estudiaba con él.

Bill no creía que a Tom le hubiera gustado ese beso, pero tal vez debía darle la razón al rubio, aprovecharía a Tom y a su falsa amabilidad lo más que pudiera.

Lo que no sabía Bill es que Tom no le prestaba atención por qué tenía otros planes, iba a convencer a Georg de volver a llevar al pelinegro a esa discoteca en específico, todavía no se le iba a declarar, y mucho menos dejaría de hacerle bullying, pero con una pared de por medio le era más fácil demostrar su amor por Bill.

F I N

Si les gustó porfa dejen un comentario, me esforcé haciendo ésto y no todos mis OS tienen portadas tan bonitas como estás así que comenten 😉

por admin

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